En
la actualidad, los patios de juegos de los centros escolares son espacios
comunes para todo el alumnado. No obstante, una rápida observación de lo que
sucede en ellos nos demuestra que ciertas áreas siguen estando vetadas a las
chicas, campos de deporte... Este hecho es doblemente preocupante. Por una
parte, constituye una manifestación clara de sexismo y, por otra, impide a los
varones que no desean participar de los juegos "típicamente"
masculinos el uso libre del espacio.